Con el Rey Felipe VI |
Con ella |
La Ley Orgánica de Universidades (LOU) de España en su artículo 54 señala que "Las universidades, de acuerdo con sus estatutos, podrán nombrar a Profesores Eméritos entre profesoras y profesores jubilados que hayan prestado servicios destacados a la universidad".
Por su parte, el artículo 152 de los Estatutos de la UNED de España señala que "La UNED se esforzará "por..., conservar como profesores eméritos a los profesores jubilados que hayan prestado destacados servicios a la docencia o a la investigación". En el art. 165 de los citados Estatutos: "La contratación de profesor emérito se hará en consideración a los méritos docentes y científicos o técnicos del candidato propuesto". También: "...el título de profesor emérito será vitalicio a los efectos honoríficos y de protocolo universitario".
Igualmente, la UNED desde el Reglamento de Profesores Eméritos regula "...la figura
de profesor emérito, adaptada a la nueva situación, poniendo de manifiesto la inestimable
aportación, que desde esta figura realizan los profesores jubilados que, tras haber prestado
destacados servicios a la docencia e investigación, continúan su labor transmitiendo su saber y
experiencia a los estudiantes y a las siguientes generaciones del personal docente e investigador
de nuestra Universidad".
Con esas premisas legales y argumentos, el Consejo de Gobierno de la UNED en su sesión del pasado mes de junio aprobó, entre otros, el acuerdo de nombrar Profesor Emérito de la UNED al Catedrático Dr. Lorenzo García Aretio en razón a sus méritos probados.
Ante el ordenador (como casi siempre) |
Más allá del reconocimiento que la Universidad española pueda hacer de estos destacados docentes es que gran parte de ellos continúan en plenitud de facultades para poder transmitir su saber y experiencia a los alumnos y, sobre todo, a las nuevas generaciones de docentes universitarios. Este grupo de Profesores Eméritos de la Universidad española (no más del 3% de las plantillas docentes), salvo algunas excepciones que pudieran darse, está conformado por ilustres y prestigiosos docentes que aglutinan multitud de reconocimientos y premios nacionales e internacionales. Pero además, se cuenta con que durante su tiempo de contrato como Profesor Emérito pueden continuar aportando a la sociedad esa experiencia y saber. Generalmente son personas con un relevante historial académico y unos destacados servicios a la Universidad. Ya es cada Universidad en sus Estatutos y normativa complementaria la que articula esta figura que, en todo caso, habrá de ajustarse a lo señalado en la Ley Orgánica de Universidades (LOU).
Cierto que esas normativas de adaptación de cada Universidad a la normativa superior ha provocado que en ciertos casos hayan existido nombramientos de Eméritos que con la normativa de muchas otras universidades jamás hubieran alcanzado ese honor.
En todo caso, mi Universidad, la UNED de España, me ha honrado con este nombramiento que empezaré a ejercer desde el 1º de octubre de 2015. Así, mientras que las condiciones físicas y mentales lo permitan, ahí estaré.
Mi Facultad de Educación |
No todo va a ser igual porque, por definición, debo rebajar mi actividad, tanto la interna en la propia Universidad como la de proyección externa. Continuaremos dirigiendo la Cátedra UNESCO de Educación a Distancia (CUED), tratando de mantener aquellas actividades que la generosidad de tantos colaboradores vienen haciendo posible. Todos los implicados en esta Cátedra UNESCO venimos trabajando "gratis et amore". Desde aquí quiero agradecer públicamente esa generosidad y actitud de servicio.
Con Michael Moore |
Igualmente, es mi intención, continuar dirigiendo la "RIED. Revista Iberoamericana de Educación a Distancia", aunque en este caso las dificultades de gestión de la misma vienen limitando mi dedicación a otros temas. Espero que la AIESAD (Asociación Iberoamericana de Educación Superior a Distancia), editora de la RIED, ponga a disposición de la revista los mínimos recursos precisos para la gestión de una publicación científica de estas características.
Mi presencia en las redes también pretendo mantenerla pero a un ritmo mucho menor que el de hasta ahora. Por tanto, no se asusten si me ven o me leen menos. Por ahora sigo vivo.
Con Sir John Daniel |
Otro reconocimiento |
- a mi esposa que lo ha merecido y merece todo. Escaso tiempo tuve para ella;
- a mis maravillosos tres hijos y a sus familias, con esos cuatro nietos que son casi los mejores del mundo;
- algún tiempo también para hacer algo de ejercicio físico (prescripción facultativa que vengo desobedeciendo sistemáticamente);
- a leer cosas diferentes a los centenares de páginas dedicados a la lectura y estudio de temas educativos (que, naturalmente, no abandonaré);
- a escuchar música, otra de mis apetencias que poco he podido disfrutar;
- a dedicar algo de tiempo a pasear por Madrid y viajar por otras bellas ciudades españolas y también de fuera de mi país;
- a pasar algún día más en mi bonito y pequeño apartamento de la playa y prodigar esas largas caminatas por el paseo marítimo;
- a recrearme con el cine, el teatro, los conciertos..., que a veces se me olvidó que existían;
- a seguir disfrutando de mi Real Madrid (de fútbol y de baloncesto);
- a pasar algún rato más con mis compañeros y amigos (ellos y ellas) más cercanos, de forma presencial y a los más alejados, a través de los mundos virtuales.
- .../..
Más premios |
En el Decanato de la Facultad (2003-2012) |
Me siento satisfecho y feliz por lo realizado, como cuando en febrero de 2013 grabé el vídeo que les enlazo aquí de nuevo. Celebraba entonces mis "50 años de docencia y 30 de investigación"
A raíz de aquella celebración ya recibí múltiples muestras de cariño y reconocimiento que me ayudaron bien a llegar hasta aquí. VER.
Por todo ello me siento, como digo, satisfecho y feliz. Aunque, cierto que me faltaron muchos sueños por realizar, aspiraciones y aprendizajes por lograr. Lo seguiré intentando. Cierto que tengo muchos defectos y debilidades que insistiré en procurar modular. Cierto que muchos esperaban de mí algo que no pude darles y bien que lo siento. Y, finalmente, cierto que a veces pude incomodar o molestar a algunos a los que aseguro que nunca hubo intención de hacerlo pero que, en todo caso, les pido disculpas si así se sintieron por mi acción u omisión.
Así es que, amigos, aquí tienen al Catedrático de la Universidad Española, Profesor Emértio de la UNED desde el 1º de octubre de 2015. Espero que sea para bien de mi Universidad, de la CUED, y de todos los amigos que confían en mí. ¡Y que de verdad, lo puedan apreciar!